viernes, 31 de diciembre de 2010

Estación Bartolome Mitre. Estación Retiro

Estacion Retiro
La estación Retiro de la ex línea Mitre constituye un verdadero símbolo de toda una época. Concebida a la manera de las grandes estaciones terminales europeas, esta singular obra evidencia el desarrollo del expansionismo ferroviario anterior a la primera guerra, con una economía local agroexportadora en pleno crecimiento y prosperidad. También, expresa con contundencia el poder alcanzado por las compañías inglesas que se hicieron cargo de la mayor parte del sistema entre 1880 y 1890. El crecimiento de las redes y del nú-mero de pasajeros hizo necesario el reemplazo de las primeras terminales: a comienzos del siglo XX, la primera estación de Retiro resultaba insuficiente para el volumen de tráfico ferroviario y tras un concurso fue seleccionado el proyecto concebido por Eustace Lauriston Conder. Al promediar el año 1915, el actual edificio estaba construido.

En ese momento, Vance & Cía. anunciaba en El Constructor que en la estación de Retiro “se han construido más de 20.000 metros cuadrados de cielorrasos con nuestro metal desplegado marca VC y varillas con púas Prong-Lock”, materiales empleados junto a mosaicos venecianos, azulejos ingleses, alcantarillas metálicas y pisos de roble reforzado que esta compañía importaba.

Durante muchos años, Retiro fue la terminal más importante de Latinoamérica, por su monumentalidad, calidad arquitectónica, dimensiones y especialmente por sus adelantos técnicos, destacándose el aspecto elegante del gran hall, con artísticas antorchas de estilo florentino y su techo artesonado.

Pero con el paso del tiempo, las intervenciones que fue sufriendo produjeron alteraciones irreversibles y agresivas: desapareció la mayor parte de su equipamiento original; sufrió la incorporación de nueva señalización, locales comerciales, cambios de iluminación y la proliferación de caóticos revestimientos.

No obstante, pese a todas estas modificaciones, la calidad espacial y la escala imponente se mantienen aún intactas.

Frente a la necesidad de preservar este monumento, en octubre de 2000 se inició la primera etapa de los trabajos para su puesta en valor. Con un costo total de 4.250.911 pesos, las obras que en dos meses terminarán de ejecutarse comprenden tanto el interior como el exterior del edificio ubicado sobre la Av. Ramos Mejía: se trabajó en la fachada, en la cúpula exterior y en las veredas, mientras que en el interior se intervino el hall de acceso vehicular, ornamentos premoldeados de las cúpulas, muros, cielos rasos, carpinterías y muy especialmente en la recuperación del restaurante y la confitería, dos grandes salones que ahora quedarán unidos y volverán a cumplir su función original.

El proyecto y la supervisión de la obra corresponden al Estudio Baudizzone, Lestard, Varas Arquitectos, con el arquitecto Gustavo Gra-del como asociado; los trabajos de restauración son llevados a cabo por la empresa Procedimientos Gorodner S.A.

En lo más alto

La cúpula del edificio presentaba problemas tanto en la estructura como en las chapas de revestimiento. Interiormente, está constituida por un entramado de madera, que por las constantes filtraciones de agua estaba muy deteriorado. Por fuera, se compone de tejuelas de zinc, decorada con ornatos también de zinc (óvalos, ramos de flores, hojas, etc.), habiendo sido necesaria una verificación pieza por pieza.

El criterio de la intervención fue ejecutar una reparación integral a fin de mejorar el aspecto exterior con la homologación de partes faltantes y solucionar los problemas de falta de estanqueidad. Como regla general, se reemplazaron las te-juelas rotas y oxidadas. Las maderas de la estructura que presentaban deterioro por agentes orgánicos, fueron tratadas con un producto bactericida con solución creolina con soplete a baja presión y se repusieron las piezas faltantes y las que presentaban corrosión perforante.

Asimismo, varias rosetas del interior no estaban bien adheridas, además de que ya se habían producido desprendimientos de partes de los ornatos. Entonces, en taller a pie de obra se moldearon las rosetas que luego fueron instaladas: se realizaron cinco moldes correspondientes a las variantes existentes. También en taller se construyeron todas las partes faltan-tes, como molduras lineales y ornatos correspondientes al centro de la cúpula, etc. Las reproducciones fueron fechadas en su parte posterior, para diferenciarlas de las existentes, identificación necesaria para la futura intervención de restauración.

El cielo raso del hall central también había sufrido las constantes filtraciones de agua: el entramado de madera en el que cuelga el cielo raso de yeso estaba en un avanzado proceso de pudrición, por lo que fue necesario eliminar esas maderas deterioradas y hacer unos nuevos apuntalamientos de las placas, ahora colgadas de la estructura de la cubierta. También, el agua había afectado al cielo raso de yeso, generando faltantes en los laterales de cada sección, que también recibieron humedad a través de las carpinterías. La recomposición de las partes faltantes se realizó con moldes y reproducciones en taller, al tiempo que se consolidaba el cielo raso realizando nuevos apuntalamientos con alambres galvanizados. Finalmente se aplicó una mano de pintura, similar a la original.

En cuanto a las fachadas principal y laterales se encontraban en buen estado de conservación, con suciedad y cambios de coloración en el símil piedra, pero atacada por la polución ambiental; aun en ejecución los trabajos de consolidación, las fachadas ya fueron limpiadas.

Actualmente en obra, el hall central de la estación presentaba problemas derivados de desafortunadas intervenciones, con restos de diferentes tonos de pintura, eliminación de partes de los fustes de las columnas, etc. Aquí, el trabajo que se está terminando es el retiro de la pintura sobre los muros y las columnas, para posteriormente consolidar y viabilizar la recuperación del revestimiento símil piedra original. Asimismo, se completaron los faltantes en fustes y en el basamento de las columnas. También, se están eliminando las manchas negras producidas por antiguas combustiones de locomotoras y se construyen las estructuras de nuevos locales comerciales.

El patio de comidas

La confitería y el restaurante han sufrido a lo largo de su historia serias modificaciones. Su estado de conservación era bastante malo: había faltantes en partes de pisos, boiserie y cielo raso. Ahora, además de decidirse su unificación, el denominado patio de comidas recuperará su identidad original.

Con respecto a la cúpula central, presentaba paños de vitreaux desprendidos, faltantes de vidrios y principalmente una gruesa capa de suciedad que impedía la entrada de luz al interior: se retiraron aquellas piezas que estaban próximas a desprenderse y en muchos casos los vidrios fueron reinstalados en otra parte de la cúpula. También se hizo la reconstrucción de las masillas perimetrales, que en algunos sectores eran inexistentes.

Exteriormente, la cúpula estaba cubierta por una estructura metálica y chapas en mal estado, que alteraban el paso de la luz que ingresa al interior del patio de comidas. Entonces, para proteger el frágil estado en que estaban los vitreaux, se aplicó un nuevo sistema de cerramiento: teniendo como base la estructura metálica existente, se diseñó un sistema compuesto por perfiles de aluminio que toman dos vidrios (uno de cada lado) del tipo blisantes 3+3, que no altera el color de la luz que ingresa al interior.

En el interior de los locales se realizaron tareas de restauración, con el completamiento de faltantes en el parquet y en la marquetería de roble y caoba; también en las columnas, las bases y los capiteles se aplicó una terminación de pintura símil dorado con características y tono similar al original; además, se recuperaron los artefactos de iluminación originales, la araña central y las arañas chicas, con pulido del bronce y completamiento de las esferas de vidrio esmerilado.

En cuanto a las carpinterías, se reconstruyeron los herrajes, se restaur





Plataforma colgante y andamios




Entre algunas de las complicaciones que mostró el emprendimiento, previo al inicio de los trabajos se estudió con detenimiento la metodología operativa de la infraestructura correspondiente al armado de los andamios necesarios, pues no debía interrumpirse el paso de los más de 70.000 pasajeros que por día transitan la estación. Por eso, en el gran hall, con un espacio de distribución de 150 m de largo, 25 m de ancho y 19 m de alto, se levantaron dos tipos de andamios: una plataforma colgante en el centro del cielo raso y dos andamios móviles a cada lado del salón. La plataforma colgante se armó con cuatro vigas de reticulado como estructura principal, vinculadas entre sí por nudos estructurales y vigas reticuladas de 40 cm de alto, unidas a las principales también por nudos estructurales, junto con un piso de placas de madera fenólica que completan la plataforma de trabajo. Todo esto fue colgado a una estructura de soporte compuesta por perfiles IPN 22 con contrapesos ubicadas en la terraza. Los equipos de tracción son de tipo Tirfor Tu10/20 y motores tipo Tirak/1000 de accionamiento electromecánico, los equipos de frenos son de sistema Block -Stop de cable pasante, uno por cada cable de tracción. Los cables de acero de tracción y freno, son de tipo Acindar, pretensados de 8, 9 y 12 mm de diámetro y 10 hilos.






Algunas Fotos antiguas de la estación Retiro













2 comentarios:

  1. Falto que colocaran foto del antiguo tablero que anunciaba la partida de todos los trenes de esa época.

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  2. Falto que colocar foto del antiguo tablero que anunciaba la partida de los trenes de aquella época.

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